¿Qué es el Storydoing? Si algo abunda en el mundo del marketing online son los conceptos y técnicas con nombres más o menos rimbombantes en inglés. Siempre se venden como ideas rompedoras, pero en muchas casos no son más que estrategias antiguas, en algunos casos incluso centenarias, actualizadas y puestas al servicio de las empresas y departamentos de marketing.
Es claramente el caso del Storytelling, del que seguro que habrás oído hablar en muchas ocasiones. Existen innumerables definiciones de Storytelling, pero la base siempre es la misma: transmitir los valores, el espíritu y los beneficios que aporta una marca no a través de la publicidad (o no solo), sino contando historias. ¿Original? En absoluto. Pero efectivo, bien, eso desde luego que sí.
Como siempre sucede con las modas, y más con las modas que ofrecen resultados, son muchos los que ya se han apuntado al Storytelling. Sigue siendo una muy buena técnica, pero ya no es un factor de diferenciación. Ahí es donde entra el Storydoing, la evolución natural del Storytelling.
Así pues, y volviendo al principio, ¿qué es el Storydoing? Simple: el Storydoing es pasar del decir al hacer. Del contar al vivir. En lugar de narrar una historia que transmita sus valores, las empresas que apuestan por el Storydoing crean una historia en el mundo real. No se identifican con unos valores, sino que los viven. La empresa, sus productos y las experiencias que estos proporcionan se convierten en una historia por derecho propio, una que los consumidores pueden vivir y disfrutar, no solamente escuchar.
En definitiva, se trata no tanto de contar historias como de proporcionar experiencias auténticas. Puede sonar muy abstracto (y sí, en parte lo es), pero probablemente se entenderá mejor recurriendo a algún ejemplo. Si hay una empresa que ha apostado por el Storydoing, y con un éxito incuestionable, es Apple. La empresa de Cupertino no vende un móvil o una tableta; vende un producto que se identifica como exclusivo, que está fuertemente ligado a una serie de valores muy atractivos y que se convierte, en definitiva, en la llave que abre la puerta de una comunidad, de un grupo -cálido, acogedor- diferente de todos los demás.
Conseguir que un móvil (o un café, en el caso de Starbucks) sea percibido de esa manera no es un milagro. Es marketing. Es Storydoing. Creatividad, emoción, implicación y una fuerte conexión emocional. Storytelling elevado al cubo. ¿Hay algún empresario en el mundo que no vendería el alma por algo así, por consumidores que vean (y prescriban) sus productos como experiencias insustituibles?
Pero no hacer falta vender el alma, no. Es cuestión de analizar y conocer muy bien nuestra propia empresa, lo que ofrece y lo que representa, escoger los contenidos apropiados y posicionarnos poco a poco en las redes sociales y fuera de ellas.
Si te sientes perdido en este mundo o sencillamente no tienes tiempo para plantearte cómo mejorar el marketing de tu empresa, nosotros podemos ayudarte. Contacta con Interaktiba en el 946 531 401 o en info@interaktiba.com y te explicaremos, sin ningún compromiso, cómo potenciar la presencia de tu marca en la mente de tu público objetivo.
Estamos aquí para ayudarte. Descubre por qué nuestros clientes están satisfechos.
946 531 401Solicítanos una auditoría gratuita de tu web, redes sociales o tu reputación online.
ESCRÍBENOS AHORATe explicamos las herramientas para obtener un flujo de clientes para tu negocio.
SOLICÍTALO YA
4 Comentarios
Hola, yo resumiría en una conclusión este post, la audiencia actual reclama experiencias reales, en mínimo libreteadas, que le permitan estar relacionada directamente con la marca, conectar con ella y porqué no participar en sus avances.
Así es, Melina. Gracias por tu comentario.
Conclusión, es ahorrarnos el tiempo de narrar una marca. Es que una marca hablé por si sola al verla, que sea auténtica, calidad, que nos haga pensar en algo bueno con el simple echo de verla…
Exacto, Camilo. Gracias por tu comentario.
One Trackback/Pingback
[…] resolver el enunciado anterior, hace falta plantear una diferenciación entre el Storytelling y el Storydoing, lo que termina siendo muy sencillo porque la discrepancia puntual es el protagonismo real que se […]
Escribe un comentario